Tapia es un típico ejemplo de pueblo de esta zona de la provincia. Situado a 45 kilómetros de Burgos, su principal acceso se sitúa al norte de la localidad, a través de la BU-V 6202, un ramal que parte de la BU-627, carretera que une Villadiego con Herrera de Pisuerga.
El pueblo, que aparece citado por primera vez en el siglo XI y en el cual hay vestigios de una herencia judía, se sitúa al pie de un promontorio en el que está la iglesia parroquial, desde donde se dominan amplios espacios de los campos que le rodean.
Por el pueblo discurre un arroyo conocido por los vecinos como arroyo Grande. La localidad cuenta con cuatro barrios bien diferenciados entre sí:
● Barrio de Santa Maria o Barrio Grande
● Barrio de la Salceda
● Barrio de la Poza
● Barrio de Vizcaya
Si bien la construcción típica es de adobe, en el pueblo destacan tres edificios de piedra, siendo el principal la iglesia tardogótica dedicada a Nuestra Señora de la Asunción.
Construida sobre los restos de una iglesia románica, consta de tres naves, siendo su retablo mayor de 1676.
Otro de los edificios que destacan en piedra es la ermita de San Bartolomé, construcción más antigua de la localidad. Anexa al cementerio, consta de una sola nave cuadrada.
El tercer edificio que destaca en piedra está al lado de la iglesia y consta de una imponente fachada blasonada. Al parecer la casa perteneció a la familia Fernández Tovar
Además de esto caben destacar otros elementos típicos como las bodegas, ya en desuso, y los tradicionales lavaderos castellanos.
Más modernos son unos preciosos murales que, sobre la pared de una nave agrícola, dan cuenta de las diferentes labores que realizaban los labradores años atrás.